El caos en la programación de anime por televisión en abierto


La limitada emisión de anime por la televisión en abierto se ha visto con el paso de los años, los cambios de hábitos de consumo y la competencia entre cadenas, en un auténtico despropósito para el espectador que, en muchas ocasiones, no logra ubicar los títulos debido a una programación caótica y una televisión que no entiende - o no quiere entender - a su público objetivo.

Salvo la excepción de Doraemon y, en parte, Pokémon, las series de animación japonesa se encuentran siempre en horarios poco atractivos que no aprovechan todo el potencial que tienen no sólo como producto de entretenimiento sino también como valor de marca en el mercado comercial (juegos, cartas, merchandising, libros, cómics, etc.).

Del acertado planteamiento con Doraemon al nocturno horario de Pokémon en Boing

Mientras que el primero, en Boing, se emite en tres grandes bloques muy bien definidos y en unas horas acorde con su target (mañana, sobremesa y access), además de largometrajes en el fin de semana en espacios de máxima audiencia o mediodía, cuando los más pequeños de la casa y la familia se sientan frente al televisor, el resto de la oferta tanto en este canal como en sus competidores se ven desubicadas con horarios que alejan al espectador objetivo.

Doraemon y Nobita merendando unos Dorayakis. Fuente: BlogVisual.
En otras palabras, ofrecer Pokémon Sol y Luna en el late night podría comprenderse si fuera dirigido a un público mayor de 25-44 años, algo que no es así en este caso. Es más, aunque en una temporada estival, con mayor flexibilidad horaria por parte de los espectadores más jóvenes sin clases de por medio, la realidad es que se trata de una serie que se ha visto en otras cadenas con anterioridad, y que no resulta en una estrategia acertada, al programarse justo después de las infinitas reposiciones de Dragon Ball Super. Mejor sería apostar por títulos más "frescos" y con un tono más adulto, siempre dentro de las opciones potentes que se encuentran licenciadas en nuestro país, creándose una franja más competitiva entre las 23:30h y las 01:00h, con títulos como Detective Conan, Naruto o One Piece, y que llamaría la atención de ese espectador más mayor y nostálgico, por ejemplo.

Neox y su deslucida franja matinal: es hora de apostar por el anime en la tarde y noche

De igual manera ocurre con Oliver y Benji, ya con emisión en las primeras horas del colegio, pasadas las 09:00h y que sus datos dejan en evidencia que una serie que en otras horas, como ocurrió en Marca TV o Clan TVE sobre las 19:00h pueden verse mucho más elevadas y que conectan con una audiencia joven, a la que podría añadirse interesantes títulos deportivos en consonancia como Haikyuu!!, por recomendar algún anime de la temática.

Elaborar bloques de emisión de una serie no es una mala idea, siempre y cuando se tenga en cuenta que sus episodios no requieren de un gran seguimiento y un argumento demasiado implícito, pero cuando el público da señales de agotamiento tras repeticiones incesantes, programar películas en bucle cada fin de semana sin un horario claro y una evidente falta de mayor variedad de animes, dejan al espacio infantil de Neox en una audiencia paupérrima. Los pocos intentos por remontar la franja matinal no han sido demasiados arriesgados, con obras muy manidas y que no implican una expectación y novedad para el público, como ha sido Bakugan, la cual estuvo varios meses en el cajón pese anunciarse durante todo un verano en el canal.

Oliver y Benji. Fuente: Filmaffinity.
Lo que se puede traducir en una necesidad de buscar apuestas más atractivas en el horario de mañana, con franquicias más familiares y actuales, y sobretodo que sean de estreno, cuya novedad se terminen convirtiendo en reclamo para descubrir a los espectadores.

La televisión pública: la oportunidad perfecta del anime en Clan TVE

En RTVE ya han dado pequeñas pinceladas con Oliver y Benji a finales del 2022, coincidiendo con el Mundial de Fútbol, y el tercer reboot de Bakugan, con unos datos que pese a todo han sido bastante correctos pese a ser una franquicia menos potente que otras. Un toque de atención en el que como cadena de servicio público debe abrazar a la animación japonesa, no solo con series, también con películas de gran valor cultural e histórico como pueden ser las del prestigioso estudio de animación Ghibli o directores de la talla de Makoto Shinkai o Hideaki Anno, por mencionar a dos ejemplos que siempre se destacan.

En cualquier caso, la cadena temática infantil del ente público ha programado con mayor acierto, ayudada también a su exenta publicidad, y una accesible y cómoda plataforma bajo demanda y streaming, que permite disfrutar de sus títulos mucho mejor que las del resto de canales en abierto. Si finalmente consiguen adquirir licencias de anime para su emisión, entendiendo el target y horarios, podría volver a recuperar ese liderazgo que siempre ha tenido y que en los últimos tiempos se ha igualados frente a los otros canales con los que compite.


Portada del artículo: Fuente: PokéMasters.

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