KochiKame

Comisaría del Parque de Kameari. Fuente: MyJcom.

Una de las comedias más divertidas de la historia del manganime es, sin duda, KochiKame. La adaptación animada de este mítico manga creado por Osamu Akimoto ha sido emitida en diversos canales autonómicos, en el desaparecido Animax o, también, en la franja matinal de Neox a nivel nacional.

Tras tiempo sin ser ofrecido en ninguna televisión, la serie puede ser disfrutada en la plataforma Pluto TV, tanto en su emisión lineal en el canal Anime Clásico como en su opción bajo demanda. Dando al espectador una excelente oportunidad de (re)descubrir este clásico de la animación japonesa sobre uno de los títulos manga más longevos de la historia.

KochiKame: Kankichi Ryotsu es un hombre de 36 años del que podríamos pensar como en alguien corriente, pero las cosas no son lo que parecen. Si bien es cierto que Ryo ha conseguido un puesto como policía en la comisaría de Kameari, su capacidad de dedicación al trabajo es inversamente proporcional a su capacidad para maniobrar estrategias en las que la consecución de "elementos" que tengan valor es esencial. Así es, Ryotsu no puede permanece inmóvil ante la posibilidad de conseguir dinero y excusa ese vicio diciendo que el sueldo del policía base es una miseria.

Algunos de los variados personajes de la serie. Fuente: Nendai-Ryuukou.

Pese a que popularmente es conocida como Kochikame, con su alocado protagonista, el policía de barrio Kankichi Ryoutsu, como estrella, su verdadero nombre es Comisaria del Parque de Kameari, distrito de Katsushika, y por tanto es una obra mucho más coral de lo que en un principio puede parecernos. Con incontables personajes secundarios que diversifican y complementan la trama de una manera soberbia.

El humor es una constante, aunque en ocasiones nos regala pequeños caramelos mucho más emocionantes y que reflejan una sociedad japonesa hasta ahora menos vista en este tipo de obras. Por lo que se agradece enormemente, teniendo en cuenta siempre su contexto. De hecho, uno de los personajes que más cariño nos aporta, desde el punto de vista de quien redacta esta reseña, es María, una chica transexual que está enamorada hasta las trancas del gamberro Ryoutsu, para sorpresas de muchos.

Precisamente, esta diversidad de personas que rondan por la comisaría y sus inmediaciones por el barrio, acompañada de las ideas tan extremas de Kankichi, son el alma del anime, que ayudan al espectador a querer conocer a nuevas personas, a cada cual más divertida que la anterior, en una atemporal historia de comedia sin fin.

No pregunten por qué esta escena. Pregunten por qué no están viendo ya la serie. Fuente: Twellv.

No podemos dejar de lado el elenco de voces de la versión española, con un reparto muy conocido por el público, ya que los hemos oídos en series como Doraemon o Shin Chan, pertenecientes a la misma distribuidora, Luk Internacional. Desde Víctor Prieto como nuestro extrovertido Ryoutsu, pasando por una brillante Pilar Ferrero como Reiko o hasta un Anselmo Herrero en el papel de Honda.

Es cierto que la animación, por su antigüedad, pueda resultar algo clásica para los más jóvenes, no obstante, no creemos que haya envejecido mal, manteniendo una calidad muy alta tras tres décadas después de su inicio.

Muy recomendada para las personas que quieran pasar un buen rato de risas, busquen una historia de personajes variados y ricos en personalidades, además de acercarse a la vida de barrio japonesa en un universo plagado de humor.