La renovación veraniega del contenedor infantil de Neox en las mañanas

Bakugan en Neox. Fuente: Apple. Editado por Estantería Otaku.

Después de varios años sin apostar por nuevos contenidos, el bloque infantil del canal Neox renueva su parrilla de cara a la temporada estival, incluyendo varios animes. Una promoción que lleva desde el inicio del verano anunciando series como Bakugan, Érase una vez el cuerpo humano o Vicky El Vikingo, entre otras, que supone una renovación que transmite un juego de nostalgia con el espectador más adulto y que busca unir a la familia frente al televisor en una franja clave en estas fechas de vacaciones.

Una estrategia que se tercia difícil de asimilar por parte del público, al recurrir a un catálogo que lleva bastante tiempo disponible de forma online en la plataforma del grupo Atresmedia, al que pertenece la propia Neox, y que en cualquier caso se presenta poca atractiva frente a títulos mucho más actuales, y episodios de estreno, que ofrece la competencia en ese horario.

A fecha de este texto, todavía no se han emitido la gran parte de las series anunciadas, al que hay que sumar la inestabilidad horaria con la cuenta el contenedor Neox Kidz, sin que el espectador conozca exactamente el número de episodios y hora a la que comienza cada serie de animación. Un problema que ya hemos analizado con Pokémon anteriormente, y que sin cambiar este aspecto poca mejoría va a lograr la cadena en esta franja.

Pokémon Diamante y Perla. Fuente: Neox Kidz.

Sí es cierto que un producto como Bakugan, pese a su antigüedad, puede ser un acertado puente entre varias generaciones, pero que, de nuevo, sin una ubicación concreta no va a lograr convertirse en una buena dupla con Ash y Pikachu. Más cuando Boing tiene en exclusiva la emisión televisiva de las temporadas más recientes y conserva un amplio número de capítulos por estrenar para los próximos meses, tanto de la primera como de esta última.

¿Qué debería hacer Neox? Como ya hemos comentado en otro análisis, toca ir a la búsqueda de títulos de animación más frescos, cuya línea argumental no sea demasiado fuerte, y en el que exista en todos los casos un equilibrio entre públicos más jóvenes y maduros, de forma que se cree un interés por acudir al canal. Y, sobretodo, definir una programación concreta y clara para que el espectador no se confunda, y pueda conectar con seguridad a la pequeña pantalla.