Destino Terra...

Detalle de la portada. Fuente: Milky Way Ediciones.
Nos hemos adentrado en uno de los títulos más destacados del manga de ciencia ficción y todo un clásico de finales de los 70. Se trata de Destino Terra..., de Keiko Takemiya y que edita Milky Way Ediciones en nuestro país. Tras la lectura del primer tomo, damos paso a nuestra reseña para aportar la valoración obtenida de esta visionaria historia.

Siguiendo la estela de las novelas distópicas, como Un Mundo Feliz de Aldous Huxley o 1984 de George Orwell, se nos presenta una civilización humana que ha decidido dejar atrás su planeta para habitar otros mundos, y con ello su libertad en manos de un sistema de control y selección de las personas.

Destino Terra... En un futuro lejano, después de haber agotado todos los recursos del planeta, los humanos se ven obligados a emigrar a las colonias cósmicas mientras sofisticadas inteligencias artificiales intentan regenerar un hogar moribundo. Alrededor del cosmos, la humanidad crece bajo la estrecha vigilancia de un sistema computarizado que forma y controla las conciencias. Este régimen provoca que se elimine la activación de los poderes telepáticos de algunos humanos, inmediatamente señalados como raza peligrosa. Telepáticos o no, todos los humanos parecen unidos por un gran sentimiento de nostalgia y un fuerte deseo de volver al planeta de origen...

Jomy y Keith, dos puntos de vistas en la obra (Páginas no ordenadas).
Tenemos dos visiones distintas de la historia: por un lado al joven Jomy, un chico distinto al resto y que alberga la unión y la esperanza entre humanos y los denominados mu, una variante de las personas con capacidades especiales. Él será pieza clave en los acontecimientos, al ser de los pocos en evitar el control mental, y con un carácter extrovertido. La otra es aportada por Keith, la perfección, hombre de pocas palabras pero que irá enfrentándose desde las entrañas del sistema a la realidad.

Pese la acción que encontramos estamos ante un manga denso, con interés filosófico y social entre sus pilares, del que hace pensar al espectador y al que arropa un dibujo en línea con la época. Todo en un contexto de tecnología, viajes espaciales y con personajes bien construidos. No son seres fijos, hay movimiento, evolución tanto a nivel físico como intrapersonal.

Con sus tintes ecologistas, fuerte crítica social y realzo de la visibilidad de las personas con discapacidad, la obra consigue atraparnos cada vez más conforme pasamos las páginas. Hay que reiterar que no es una lectura sencilla, que requiere su tiempo y, sobretodo, que necesita asimilarse para el razonamiento del lector.

Búsqueda de orígenes y del hogar.
La edición española es de exquisita calidad, en volumen tamaño B6 (13x18) rústica con sobrecubierta, que aglutina más de 350 páginas al que acompañan algunas a color, y por un precio muy razonable de 10 euros.

No nos cabe duda que Destino Terra... es un título esencial del manga, que hará vibrar a los amantes del género distópico, en un contexto cósmico, de héroes comprometidos y mensajes muy potentes. Es de esas obras que evocan a hacerse preguntas, planteamientos y donde la posición de sus personajes no tiene porque ser siempre la acertada.


Terra E... © 1977 Keiko Takemiya

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